El contenido de humedad ideal para almacenar maíz de forma segura es de alrededor de 13-14%. Almacenar maíz con este nivel de humedad ayuda a prevenir la aparición de moho, bacterias e insectos, lo que garantiza una conservación a largo plazo sin comprometer la calidad. El uso de un medidor de humedad ayuda a garantizar que el maíz alcance este nivel de humedad ideal antes de almacenarlo.