El contenido de humedad juega un papel fundamental en el cultivo del arroz porque afecta directamente la calidad, el almacenamiento y la rentabilidad de la cosecha. El arroz con demasiada humedad es propenso a estropearse, a desarrollar moho y a pudrirse, mientras que el arroz demasiado seco puede agrietarse y perder calidad durante el procesamiento. Mantener el nivel de humedad adecuado garantiza el valor nutricional, el sabor y la comercialización del arroz. El uso de un medidor de humedad del arroz permite a los agricultores monitorear y controlar el contenido de humedad, preservando la calidad de sus cosechas y evitando pérdidas.