Si el nivel de humedad del heno es demasiado bajo, su valor nutricional disminuye. Esta reducción se produce porque las hojas, que contienen la mayoría de los nutrientes del heno, pueden romperse durante el empacado si el heno está demasiado seco. La baja humedad también reduce la palatabilidad del heno, haciéndolo menos atractivo para el ganado.